Nadie está libre de pecado así que guarden las piedras
La afirmación de Jesús al momento de salvar a la prostituta mirando a todos aquellos que querían apedrearla por haberla encontrado en pecado me ayuda a hilvanar esta reflexión que me atrevo a esbozar.
La realidad argentina se llena minuto a minuto de cuadernos, empresarios arrepentidos, políticos de un lado y del otro que han transitado los 35 años democracia en la Argentina mudando según se pudiera en gobiernos de distinto color sin ni siquiera sonrojarse.
Amigo lector no entraré ha desmenuzar las noticias y sus novedades que abundan y mucho en los medios de comunicación y las redes sociales lo mío va por otro lado así que desacelerese y trate de ver el otro lado de las cosas. Deje a salvo su ideología pero eso sí haga un acto de sinceramiento mirando a su alrededor y a su ser íntimo.
Sabe amigo lector estoy cansado de tanto chamuyo y como dijo algún político que la economía argentina desde el Virreinato de la Plata se basó en el contrabando y desde ahí en adelante de legiones de patriotas tuvieron beneficios estando en funciones públicas. Anímese y busque en libros de historia argentina y encontrará muchísimos ejemplos.
Ya está llegamos a la primera afirmación y es que en que en nuestro ADN encontramos la inclinación a ir por izquierda, entre otras tantas dicotomías que ya explayó la gran Eladia Blazquez en el tangazo "Somos como Somos". Como dice el tango miremosno "de frente sin ropa y sin disfraz..." así quizás "...! aprendamos pronto el tomo
de asumirnos como somos o no somos nunca más.
Y sepa una cosa yo también estoy cansado de la mediocridad de los personajes que pululan en nuestra clase política. Una clase política que en estos 35 años de democracia no nos hizo feliz como país. Estoy cansado de de la clase empresarial que al igual que aquellos contrabandistas del Virreinato se beneficiaron con la ayuda de algún funcionario. Y si sigo sumo a legisladores, jueces y sabe que no se olvide de poner a los que formamos el pueblo.
Ah acá es donde quiero llegar porque el pueblo no ha estado fuera de todo lo que ha ocurrido a lo largo de la historia argentina.
Estoy cansado de todo y de todos y si sigo dando ejemplos no terminaré de hacer la reflexión que quería compartir.
La realidad de decadencia económica y política se resume en que los argentinos no confiamos en la Argentina. Porque la Argentina para muchísimos argentinos es un lugar de paso y no es la Nación que todos debemos conformar y construir diariamente.
Estoy cansado porque en el exterior hay hoy ya no $ 400 mil millones de dólares sino mucho más. Y ese monto es de argentinos de los deshonestos y y también de los honestos.
Entonces cual es la diferencia entre ellos? Sabe una cosa no hay diferencia porque solo con la mitad de esos miles de millones en el país algo empezaría a cambiar.
Así que a todos los que pasaron, a los que están y a los que estén en el futuro les pido no jodan y no nos jodan más porque como sabemos que somos como somos. podremos enderezar el rumbo así para empezar pueblo y autoridades ya sabemos que en estos 35 años de democracia que nadie estamos libres de pecado así que guardemos las piedras y no apedreemos a nadie. Más hagamos mejor otra cosa el ladrillo que tiene en la mano úselo en algo positivo. Usemoslo y empecemos a convertirlo en algo positivo que ayude a construir un Argentina con mayúsculas.
Somos como Somos. Eladia Blazquez
Miremos este espejo bruñido y reluciente
sin el engrupe falso de una mentira más...
Y vamos a encontrarnos con toda nuestra gente
mirándonos de frente sin ropa y sin disfraz...
Con toda nuestra carga pesada de problemas
hagamos un teorema de nuestra realidad...
¡Perdamos todo el vento, la torre y el "alfil"!
¡En este "escrachamiento", de frente y de perfil!
¡Como somos!...
sensibleros, bonachones
compradores de buzones por creer en el amor.
¡Como somos!...
con tendencia al melodrama
y a enredarnos en la trama por vivir en la ficción.
¡Tal como somos!...
como un niño acobardado con el andador gastado
por temor a echarse a andar...
Chantas.. y en el fondo solidarios,
más al fondo muy otarios y muy piolas más acá...
¡Vamos...! aprendamos pronto el tomo
de asumirnos como somos o no somos nunca más.
¡Nos gusta hacer las leyes, después crear la trampa
tirando por la "rampa" las tangas a rendir,
cargar a voz en cuello, y protestar bajito
prefabricando mitos para poder vivir!
Nos gusta sobre todo comer a dos carrillos
rociando con tintillo la gris preocupación,
y así mancomunados hacemos con unción
el culto más sagrado... a la manducación.
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