En un flojo partido en el Florencio Sola, prevaleció la solidez y frescura del equipo de Sanguinetti ante un rival que nunca pudo imponer su juego y no tuvo respuestas ante la adversidad.
Luego de un primer tiempo discreto dónde casi no hubo jugadas de riesgo, el Taladro cambio el chip en la segunda parte y demostró porque fue finalista de la Copa Diego Maradona.
Al minuto del segundo tiempo tras un inexplicable error de cálculo de Martínez y posterior falla de Soto en la cobertura, Juan Álvarez ganó la posición y definió cruzado ante la desesperada salida de Arias que nada pudo hacer.
A partir de ahí, Banfield le cedió la iniciativa a la Academia, se cerró bien atrás y buscó aprovechar salir rápido de contra.
Racing nunca encontró los caminos para vulnerar la defensa del local. Las variantes tampoco le cambiaron la cara a este opaco e inexpresivo equipo de Pizzi, que extraño mucho a Lisandro López.
Sobre el final, un error de Miranda en la salida le permitió a Galoppo convertir el segundo gol tras una serie de rebotes.
Banfield demostró ser cosa seria y que de la mano de Javier Sanguinetti (8 triunfos en 13 partidos dirigidos) será un duro rival para cualquiera.
Por su parte, Pizzi deberá trabajar mucho para levantarle la confianza a un plantel que viene golpeado.
(Foto cortesía AS Argentina) |