Amigo lector tal vez los años que cada uno tiene vivido tienen impregnada alguna canción un autor un cantante y sí la vuelve escuchar en algún momento de seguro su mente ira hacia atrás en el tiempo y hasta su corazón empezará a vibrar.
Y así sin que no nos propongamos recordar las notas de una canción nos muestran su estrecha relación con parte de la historia que cada uno hemos vivido. Y esto atraviesa las décadas, los años, las circunstancias que han ocurrido en cada época.
Siempre me he preguntado cuantos romances nacieron en lo Hansen, lugar mítico de Palermo donde sonaron los primeros acordes del tango que como género musical conquistaría el mundo de la mano de Arolas, Gardel, Troilo y Piazzola.
O los romances que nacieron en los bailes de carnaval en la década del 40 en el club San Lorenzo y Racing entre o u otros clubes de barrios donde Alberto Castillo cantaba que siga siga el baile al compás del tamboril.
O los noviazgos que comenzaron con el telón de fondo de algún tango cantado por Alberto Morán, que con su pinta y voz enamoraban a jóvenes quinceañeras entre las que estaba mi madre en la década del 50.
Los 60 trajeron los Beatles, Sandro, Palito Ortega, Joan Manuel Serrat, Leonardo Favio, Roberto Carlos, Los Wawancó, Los Gatos, Manal y muchos otros populares como Bárbara y Dick, que nos mostraron su arte y acompañaron a la adolescencia y a la juventud de una generación.
El rock y los 70 con los Luna Park de Barrock y Sui Generis.
Los 80 con los recitales en Obras y con la aparición de la Trova Rosarina.
Cuantos músicos le pusieron voz y letra a más de un momento de nuestra vida, coloreando un sentimiento que nos ha pasado por las venas.
Y no solo se trata de romances sino también de todo lo que nos acompañó la música en cada etapa de la vida que nos tocó vivir.
Cuantos como adolescentes hemos estado en el cuarto estudiando escuchando música en la radio o en un viejo walkman.
Pensar que a Charly García también lo escuché una mañana de mayo del 83 por los altoparlantes del Regimiento 7 de Arana cuando entraban los nuevos conscriptos. Y que afuera del cuartel hacía rato ya Baglietto nos deleitaba con Mirta de regreso y La vida es una moneda, entre otros temas
Por cada década y por cada uno de nosotros podríamos mencionar autores, canciones y lugares en el que hemos estado y una canción seguro al escucharla nos transporta a una etapa de nuestra vida.
Podemos decir que en las canchas de futbol de nuestro país fue donde resonaron los primeros cánticos de resistencia a la dictadura militar del 76 y también el clamor de nuestra pasión futbolera en “Muchachos, ahora nos volvimos a ilusionar” que pasará a la historia.
Es así amigo lector hay siempre una canción que hemos escuchado alguna vez que nos movilizó y al escucharla nos hace vibrar el corazón. Por eso para muchos que pasamos los 60 al ver la biopics de Fito Páez nos hizo ir hacia atrás en el tiempo y escuchar esa canción que nos conmovió y nunca olvidamos
Y sabe por qué? Por qué no es Fito solamente es como dice Fabián Gallardo en un hermoso tema de su autoría que dice que:
“Es la música que corre en nuestras venas
Es un ritmo que contagia y es mejor
Porque así no estamos solos
Hoy la calle nos alcanza en un grito
Que es la música de hoy”
Solo se trata de saber que cada uno cual o cuales son los temas que son inolvidables en la parte de la propia historia
Porque al final es claro y contundente que la voz del Flaco Spinetta nos sigue diciendo desde el cielo Toda la vida tiene música hoy y siempre
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