Se termina el aciago 2020 y entre tanto desaliento estamos a punto los Charrúas de volver a pisar el verde césped. El comienzo de cada torneo es para nosotros el reencendido fuego esperanzador de ascender.
Este mini-campeonato es distinto a todos los anteriores, tendrá una extensión de dos meses, se permitirán cinco cambios, se juega en estadios neutrales sin público, a un solo partido sin revancha y con todos los protocolos sanitarios pertinentes.
A primera vista arrancamos perjudicados porque de cinco partidos que se jugarán en la zona tendremos tres en Buenos Aires y dos en Rosario, esas cosas de la vida, usted vio.
Central Córdoba se encuentra mejorando su estadio gracias al esfuerzo de dirigentes actuales y anteriores, con la ayuda invalorable de las distintas peñas formadas por quienes quieren al club. Por ese lado nos viene bien la neutralidad para poder terminar con éxito las obras en el Gabino Sosa.
En cuanto al equipo en sí El Charrúa es toda una incógnita fruto de la renovación de su plantel.
Tenemos un cuerpo técnico muy conocido por todos nosotros, más allá que nos guste o no su planteo en cancha, Vaquero y sus colaboradores son gente a los que hay que reconocerles la dedicación, todos conocen muy bien al club y a la categoría. El actual DT asumió a poco de terminar la participación en el torneo anterior, jugó dos partidos, ganó uno y perdió el otro así que no hay tela para cortar desde ese lado, luego la pandemia y ahora la renovación del plantel. Cuando se conforma un nuevo equipo siempre habrá cosas que podremos poner en tela de juicio.
Lamento mucho la ida de jugadores, especialmente los que se formaron en nuestra cantera. En mi caso personal me duele y hasta me parece incomprensible que se haya dejado afuera a Sgotti, un jugador de otra categoría a la que vemos usualmente en la C, también a Facundo Herrera que nunca tuvo la continuidad como para mostrar sus virtudes y por último a Aléxis Martínez un enganche que era visto como la joyita del club y al cual seguramente le faltaba formación, pero esa era la idea, que se terminara de formar, ahora se lo dejó ir (con lo que cuesta encontrar un enganche en el futbol argentino y más en la C), para redondear el “mal” firmó para el Salaito, igual desde esta página le deseamos la mejor de las suertes y ojalá vuelva al club pronto y no nos salga muy caro repatriarlo.
En cuanto a los refuerzos, llegaron muchos, algunos viejos conocidos del club como Damián Ledesma y Diego Migueles y otros que harán su debut con la camiseta azul pero que tienen una amplia trayectoria que los respalda, tal los casos de Brian Urquiza, José Vizcarra y Juan Manuel Cobelli, más jóvenes formados en otros equipo, especialmente el Salaito, del paladar de Vaquero quien respaldó su llegada, me refiero a Julián Bembo Iván Antunes, Aron Montori, Ezequiel Montero, Matías Recalde, Fabricio Lovotti, Sebastián Porta, Estanislao Ferrero, y Milton Treppo.
El plantel se completa con los “sobrevivientes” de la temporada pasada: Matías Giroldi, Alan Peralta, Lucas Rodríguez, Agustín Biñale, Paulo Killer, Maxi Saucedo, Lautaro Yocco, Emiliano Pignani, Lucas Bracco, Lautaro Cantarelli, Bautista Carrera, Iván Flamenco, Matías Gómez, Agustín Musso, Alejandro Raimondo, Juan Carlos Lescano y Gastón Tedesco
Al inicio de la nota dije que el equipo Charrúa es una incógnita, hacía referencia a qué, además del tiempo parado y que perjudicó a todos los clubes en general, tendremos que ver cómo se adaptan tantos nuevos jugadores, cómo responden los jóvenes que llegaron y el estado físico de los de mayor experiencia (para esta circunstancia habrá que saber aprovechar muy bien la posibilidad de los cinco cambios). Así que a priori tenemos una plantilla "larga" que segura poder armar un buen banco de suplentes, además Vaquero a logrado la comunión necesaria entre juventud y experiencia, en cada línea se cuenta con jugadores de extensa trayectoria y jóvenes ilusionados, algo muy bueno para un plantel con deseos de ascender.
Voy a dejar en claro un punto en cuanto al futuro análisis de los partidos del Charrúa que El Agrio va a realizar. Estamos ante una instancia inédita en la historia del futbol mundial, el torneo para nosotros comienza el lunes, hubo muy pocas prácticas y jugadores que llegaron sobre la hora más el agregado de estar tanto tiempo parados y por más esfuerzo y profesionalismo que ponga Vaquero en verdad la tiene difícil, así que no voy a exigirle al equipo que funcione como un relojito suizo ni que cada jugador nos dé de entrada su mejor versión, descuento desde el vamos que todo harán lo mejor posible y como siempre seré honesto con lo que mi criterio, acertado o no, vea en cancha, voy a señalar todo lo que me parezca bien y si algo no me gusta lo diré con el objetivo de ser constructivo, de agregar mi granito de arena para mejorar.
Digo todo esto con antelación porque con el “diario del lunes” todos somos la suma perfecta de Bilardo, Menotti, Bianchi y Gallardo (ventaja con la que no cuentan los técnicos que deben tomar decisiones antes del partido) así resulta fácil ponerse en adulador si todo sale bien o dedito acusador si todo sale mal, El Agrio se la juega en el aquí y ahora.
Dicho esto, en ese aquí y ahora que señalaba, este es nuestro equipo, nuestro cuerpo técnico, se fueron los que se fueron, llegaron los que llegaron, el tiempo de mirar para atrás terminó, todo el apoyo para estos hombres que van a poner el cuerpo en cada partido para representarnos.
Me despido, como siempre, disculpándome si mi crítica molesta a algún alma sensible.
-Pablo Adrián -El Agrio- |