Muchas son las discusiones y amplios los debates sobre el fútbol actual, los cambios, la táctica, la estrategia, la importancia de los jugadores, la influencia de los entrenadores, de los preparadores físicos… e inmediatamente surge la comparación con el fútbol de años anteriores y se instala la polémica en torno a una pregunta recurrente: ¿se jugaba mejor antes que ahora?
“No hay fútbol moderno ni fútbol viejo. Hay buen fútbol o mal fútbol” decía el Periodista Dante Panzeri. Y utilizando esta frase como disparador, podemos decir que algo de razón tiene. Es innegable que al deporte más hermoso del mundo se lo sigue jugando prácticamente con las mismas reglas, once contra once, con una pelota y siempre con el objetivo de convertir más goles que el rival. Ahora… La velocidad del juego, la técnica de los jugadores, el ritmo de los partidos, etc… es el mismo que, por ejemplo, en los años 80 o 90? Humildemente, mi opinión es NO. El fútbol ha cambiado y el que no lo ve, es porque no quiere verlo. Uno de los motivos que considero principales, es la importancia de los preparadores físicos, y por ende, la mejora de las prestaciones de resistencia, velocidad, fuerza y demás cualidades, que llevan al jugador a estar “a tope” de sus posibilidades, y pueda realizar sus acciones mas rápido y por mas tiempo. Esto no implica que se traduzca en belleza futbolística, más bien todo lo contrario.
Otro aspecto, es la preponderancia y el rol de los entrenadores, que en su afán de automatizar, mecanizar y demás, ofrecen mayores soluciones a sus dirigidos pero… ¿no le quitan impronta y espontaneidad al juego?¿ No sería mejor un mix que conjugue el hecho de estar atento a los detalles pero sin que el futbolista pierda capacidad de resolución individual? Aquí se abre si se quiere otra “grieta”, en relación a los directores técnicos que “confían y dan libertad “ vs los que creen que esa es una forma de desentenderse, de deslindar obligaciones y pretenden no dejar absolutamente nada librado al azar, quizá buscando “predecir” que puede llegar a suceder en cada momento durante el desarrollo del juego.
Este articulo pretende brindar solo algunos ítems de porque el fútbol de hoy día se distancia cada vez más del mismo deporte, pero en años pasados. El debate, la charla, la discusión seguramente es mucho más profunda (¿cómo se trabaja en divisiones inferiores? ¿Cuánto influye la presión mediática en el juego? El fútbol fue siempre un gran negocio o en la actualidad se potencio?) y cada quién, defenderá una postura respecto a sus ideales. Lo que no podemos soslayar es que “jugar a la pelota” ha cambiado, indefectiblemente... ¿para mejor o para peor?
Matías Pierabella
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