Los dos equipos más regulares de la competición buscaban levantar su autoestima y mejorar su nivel de juego colectivo en un encuentro bisagra para corregir errores de cara al resto del semestre, sin embargo, se vio un juego carente de luces y ausente de ideas.
Si bien el equipo visitante intentó más y por merecimiento debió adjudicarse la victoria y llevarse los tres puntos a su casa, sus situaciones no generaron peligro. Tanta fue la especulación de Fénix que perdió la posesión y el mate aprovechó para meter el primer tanto del partido.
El gol tempranero fue de un error en la zaga central de los visitantes, lo que permitió que Domínguez penetre el espacio en profundidad y defina suavemente ante la salida del arquero. A partir de la puesta en ventaja, Argentino decidió establecer su juego ofensivo mediante contraataques y casi consigue el segundo mediante un desborde de Acosta , sin embargo, esa pelota en forma de buscapié se fue por la banda y no encontró a nadie.
El mate pudo liquidar el partido sobre el final del primer tiempo, cuando Martínez eludió al arquero y tenía al autor del gol Domínguez como opción de pase, pero en vez de dársela quiso jugar la individual y la tiró afuera. Los integrantes del equipo criollo sabían que ese error se pagaría caro en la segunda mitad.
En el complemento, tal como se advertía sobre el final de la primera parte, Fénix comenzó a ganar el protagonismo perdido por momentos y recobró la memoria. A los trece minutos del epílogo, gracias a una jugada típica del Estudiantes de Zubeldía con un centro de córner desde la izquierda hacia el primer palo y una peinada posterior, Ruiz apareció por el segundo para igualar las cosas.
Luego de varios intentos por parte de ambos equipos aunque sin efectividad, el árbitro sentenció el final de un partido opaco en el que se vieron a la luz las cuestiones a mejorar tanto para Argentino como para Fénix. |
