Cuando el gran relator uruguayo Víctor Hugo Morales inmortalizó el segundo gol de Maradona a los ingleses, entre la euforia y la emoción expresó: “¿De qué planeta viniste barrilete cósmico?” Lo que sucede es que muchos piensan que Maradona es un jugador que vino de otro planeta y lo anotaron como nacido en Villa Fiorito para hacerlo pasar como a un ser humano más. Pero al margen de eso siempre quedó flotando el interrogante de saber de qué mundo podría haber venido. Porque no puede ser un mortal más un tipo que hace esas cosas con una pelota.
A quienes sostiene que al haber agua en Marte tiene que haber vida y si hay vida los marcianos tienen que jugar al fútbol, si no ¿qué clase de vida tienen?
Por ser el cuarto cuerpo sólido celeste del sistema solar y estar más alejados del Sol que la Tierra, se deduce que deben ser algo pechos fríos jugando a la pelota. Jueguen o no al fútbol los del planeta vecino tiene un equipo que los representa en la Tierra. El club está en el país centroamericano de El Salvador y se llama Club Deportivo Atlético Marte, en una manera de homenajear al dios de la guerra en la mitología romana.
Fue fundado en 1950, más precisamente un 22 de abril, y a lo largo de su historia “El inmortal”, como también se lo conoce, ha ganado casi una decena de campeonatos y dio el batacazo cuando en 1991 se adjudicó la Recopa de la CONCACAF. A sus hinchas, como no podía ser de otra manera, se los conoce como “Los Marcianos”. El equipo que sale a la cancha vestido de azul y blanco, hace de local en el estadio Cuscatlán de San Salvador y se ha convertido en uno de los más importantes de la liga salvadoreña junto a Luis Ángel Firpo, Fas y Alianza. Aunque también vivió su desdicha cuando se le vino la noche y cayó al abismo del espacio en el 2002 al irse al descenso. Pero poco más de un lustro después volvió a su orbita y regresó a la Primera División.
Es una lastima que Sergio Saturno, Agustín Orión y Damián Luna no hayan integrado sus planteles ya que se hubiesen adaptado sin ningún inconveniente al club salvadoreño que, dicho sea de paso, nunca tuvo la oportunidad de enfrentarse a “Los Galácticos” del Real Madrid. Lo que hubiese sido un partido de otra galaxia.
Con el desarrollo vertiginoso que tiene la humanidad, no es de extrañar que en el futuro se pueda viajar a Marte y hasta jugar al fútbol sobre su superficie, si es que ya sus moradores no lo hacen. Porque el hecho de que no se sepa si hay vida allí, no significa que no la haya.
Quizás entre tantas copas y campeonatos que se organizan, algún día se podría jugar la Copa Interplanetaria. Como las selecciones de Argentina y Uruguay que cuando empezaron a competir se median entre ellos, por la sencilla razón de que los países estaban uno al lado del otro, los equipos terrícolas y los extraterrestres se enfrentarían entre sí.
Llegado el caso de que un equipo tenga que viajar al planeta rojo, quién mejor que el Atlético Marte para ir y pintarles la cara a los marcianos, que no deben tener ni la más remota idea del sentimiento que sienten los habitantes de la Tierra por fútbol, ese juego que es pasión de multitudes. |